GLOSARIO

  • Acetilcolina. Es un neurotransmisor. Fue el primer neurotransmisor que se descubrió, hallazgo lo que valió el Premio Nobel de Fisiología y Medicina a sus descubridores, Henry Hallett Dale y Otto Loewi en 1936. En los cerebros normales la dopamina y la acetilcolina están en equilibrio, por lo que cumplen sus funciones inhibidoras y excitadoras. La disminución de los niveles de dopamina rompe el equilibrio existente entre ambos neurotransmisores, con lo que se produce el aumento de los niveles de acetilcolina y se produce, entre otros síndromes neurológicos, la enfermedad de Parkinson.
  • Acinesia (del griego: ἀκινησία, inmovilidad). Es la ausencia o pobreza de movimientos espontáneos como parpadear o tragar saliva. Se trata de un síntoma que se manifiesta como la incapacidad para iniciar un movimiento preciso o voluntario.
  • Agonistas. En la enfermedad de Parkinson, el término agonista se utiliza con dos significados. Así, se refiere a un compuesto químico que es capaz de incrementar la actividad de otro, tal como una hormona, un neurotransmisor, un medicamento, etcétera. Se refiere también al músculo que efectúa un movimiento, por oposición al que realiza el movimiento contrario o músculo antagonista.
  • Agonistas dopaminérgicos. Son medicamentos que se toman unidos a la levodopa con el fin de potenciar sus efectos, de tal manera que se consiguen los mismos resultados utilizando una dosis menor de levodopa.
  • Alucinaciones: percepción falsa de la imagen de algo sin que exista realmente dicho objeto.
  • Amimia. Procede del griego (ἀ-µῖµος) y significa la pérdida de la facultad de expresar sentimientos, sensaciones o gestos mediante la expresión facial.
  • Ansiedad. Es un trastorno psicológico muy común que, en términos generales, consiste en un estado de angustia, preocupación o miedo cuya causa no procede del exterior de la persona sino de su propia interioridad psíquica. Suele manifestarse como alteración nerviosa (estar nervioso, sentirse irritado) y suele asociarse a dolores de cabeza, de espalda o cuello, y al cansancio.
  • Anticolinérgico. Los medicamentos anticolinérgicos actúan sobre el sistema nervioso central bloqueando alguno de los receptores de la acetilcolina. Se utilizan a dosis bajas para reducir el temblor muscular característico de la enfermedad de Parkinson. El hecho de que produzcan adicción y de que, al retirar su uso, regresen los temblores ha llevado a que cada vez sean menos utilizados.
  • Antieméticos. Son medicamentos que se utilizan para prevenir las náuseas y los vómitos. En la enfermedad de Parkinson se utilizan para combatir los náuseas y los vómitos producidos por la ingesta de determinados medicamentos.
  • Bradicinesia. Lentitud anormal de los movimientos. Pérdida gradual de movimientos espontáneos.
  • Carbidopa. Es un medicamento que no produce efecto alguno si se toma solo. Se toma asociado a la levodopa con el fin de inhibir su metabolismo periférico. Puede producir somnolencia y mareos.
  • Cuerpos de Lewy. Están presentes en las células dañadas por la enfermedad de Parkinson. Son estructuras eosinofílicas presentes en el citoplasma de las células. Tienen relación con el deterioro cognitivo en la enfermedad de Parkinson. La denominación de Cuerpos de Lewy se la dio C. Tretiakoff en 1919, en reconocimiento a su descubridor Fritz Heinrich Lewy (1912).
  • Depresión. Es un trastorno psíquico transitorio o permanente que se caracteriza, entre otras manifestaciones, por un estado de abatimiento, tristeza, infelicidad, irritabilidad, sentimiento de culpabilidad, dificultad para dormir, pensamientos de muerte y suicidio. Los estados depresivos suelen ir acompañados de un estado de ansiedad. Esta enfermedad repercute negativamente en la vida diaria, reduciendo la calidad de vida. Es un hecho constatado que la depresión acompaña con frecuencia a la enfermedad de Parkinson. Existen estudios científicos que vinculan la depresión con la prevalencia de padecer Parkinson.
  • Deterioro de fin de dosis. Se llama así a la pérdida de efecto de una toma de levodopa antes de que haga efecto la dosis siguiente.
  • Disartria (de dis- y del griego ἄρθρον, articulación). Es el trastorno relativo a la articulación de la palabra, que es percibida como débil y poco coordinada. Puede ser causada por problemas neurológicos, entre ellos la enfermedad de Parkinson. La disartria la provoca un trastorno nervioso, cerebral o muscular que dificulta el control de los músculos de la boca, la lengua, la laringe o las cuerdas vocales.
  • Disfagia (de dis- y φαγέω, comer). Se trata de un trastorno de la deglución, que se manifiesta como dificultad para tragar. Se considera que la deglución es segura cuando ningún resto de líquido, alimento o saliva llega a la vía aérea y además debe efectuarse a tiempo, es decir, en unos pocos segundos. La enfermedad de Parkinson puede afectar estas dos características de la deglución.
  • Discinesias o disquinesias (de dis- y κίνησις, movimiento). Se trata de movimientos involuntarios anormales que pueden aparecer como efecto secundario del uso prolongado de la medicación contra la enfermedad.
  • Distonía. Es un trastorno del movimiento, que consiste en contracciones involuntarias de los músculos. Estas contracciones pueden afectar a uno o a varios músculos y pueden ser dolorosas. Se manifiestan, por ejemplo, en forma de temblores o del arrastre de un pie. Las primeras manifestaciones de la enfermedad de Parkinson suelen ser la distonía y la bradicinesia.
  • Dopamina. Es un neurotransmisor que se produce en diversas partes del sistema nervioso, sobre todo en la llamada materia negra. Como neurotransmisor o mensajero químico, transmite los impulsos nerviosos de una célula a otra. La destrucción de las neuronas productoras de dopamina en los enfermos de Parkinson produce en estos pacientes la pérdida de los movimientos voluntarios que controla el sistema nervioso central. Fue sintetizada por primera vez por George Barger y James Ewens en 1910, pero no fue hasta 1952 cuando se descubrió su función de neurotransmisor, hallazgo realizado por Arvid Carlsson, que contribuyó, junto a otros trabajos sobre los neurotransmisores, a que le concedieran el Premio Nobel en Fisiología y Medicina en el año 2000.
  • Epidemiología. Es la rama de la Medicina que se ocupa del estudio de las epidemias. A través de sus estudios conocemos como aparece así como el reparto de las enfermedades entre los distintos grupos humanos, áreas geográficas, naciones o pueblos.
  • Escala de Hoehn y Yahr. Es una de las primeras escalas que se desarrollaron para medir el desarrollo de la enfermedad de Parkinson. La desarrollaron los neurólogos norteamericanos Magaret Hoehn y Melvin Yahr en 1967. Se trata de una escala de estadificación simple que combina la discapacidad y los signos de deterioro. Distribuye la evolución de la enfermedad en cinco estadios que permiten conocer la gravedad de la afectación de la enfermedad.
  • Estadios. Son las etapas de evolución de la enfermedad de Parkinson.
  • Estadios on/off. Son las fluctuaciones con las que se manifiesta la enfermedad de Parkinson a lo largo del día y aparecen como consecuencia de los efectos secundarios derivados de su tratamiento farmacológico. Se habla de estadios on cuando los síntomas de la enfermedad están controlados y la actividad motora del enfermo es normal. Los estadios off se relacionan con la aparición de síntomas de la enfermedad y con una función motora alterada.
  • Etiología (del griego αἰτιολογία, estudio de las causas). Se refiere al estudio y conocimiento de las causas de la enfermedad.
  • Festinación (del latín festinare, apresurarse, acelerar). Se trata de un trastorno común a algunas enfermedades de origen nervioso, entre otras a la enfermedad de Parkinson. Se describe como comenzar a andar y, de manera involuntaria, hacerlo inclinado hacia adelante, con pasos cortos cada vez más rápidos y sin tener la capacidad de detenerse. Es causa frecuente de caídas.
  • Freezing, bloqueos o congelación. Se trata de la incapacidad temporal e involuntaria de moverse. Suele manifestarse como un trastorno de la marcha y se produce cuando se quiere andar y, sin embargo, los pies permanecen pegados al suelo sin moverse. Puede afectar a otros movimientos, como no poder levantarse de una silla, y a algunas partes del cuerpo. Estos episodios suelen durar solamente unos segundos.
  • Funciones cognitivas (del latín cognoscere, conocer). Son los procesos mentales que nos permiten realizar las tareas correspondientes al procesamiento de información, uso del lenguaje, razonamiento, atención, memoria, pensamiento abstracto, resolución de problemas, toma de decisiones y capacidades visuo-espaciales. Los procesos cognitivos pueden ser conscientes e inconscientes. Se habla de “alteraciones cognitivas leves” y de “alteraciones cognitivas” cuando las alteraciones o cambios son pequeños y afectan a aspectos concretos como la memoria o la capacidad de pensamiento. Se habla de “demencia” cuando las alteraciones afectan a distintas áreas de la función cognitiva.
  • Ganglios basales. Se habla de ganglios basales para referirse al conjunto de varios núcleos de localización subcortical, que tienen interconexiones anatómicas y funcionales entre sí así como conexiones con el tálamo, los centros motores del tronco central y el córtex, responsables de la coordinación muscular, entre otras funciones.
  • Hiperhidrosis. Es una patología benigna, que consiste en la secreción excesiva de sudor producido por las glándula sudoríparas. Hay enfermedades como la de Parkinson en las que se produce hiperhidrosis.
  • Hipersialorrea o ptialismo. Es la salivación excesiva y se encuentra, entre otras, en la enfermedad de Parkinson.
  • Hipocinesia (del griego ὑπό, poco, y κίνησις, movimiento). Es el trastorno de la movilidad que se caracteriza por la lentitud y la disminución de los movimientos. Es una característica de la enfermedad de Parkinson. Si la hipocinesia es intensa se denomina acinesia.
  • Hipofonía (del griego ὑπό, poco, y φωνή, sonido). Es un trastorno de la fonación que consiste en expresarme mediante un habla baja y monótona. Es una característica, entre otras, de la enfermedad de Parkinson.
  • Hipomimia (del griego ὑπό, poco, y μῖμος, mimo). Significa la disminución o la falta de la expresión de la cara y de los gestos.
  • Hipotensión ortostática. Se dice que una persona es hipotensa cuando tiene la tensión arterial baja. Se padece hipotensión ortostática cuando se produce una bajada muy rápida de la tensión arterial en que se incorpora con rapidez. Suele traducirse en mareo y aturdimiento.
  • Hipotonía (del griego: ὑπό, poco, y τόνος, tensión) . Significa disminución del tono muscular, o sea, de la tensión muscular que tienen los músculos, aunque estos estén en reposo.
  • Idiopático (del griego: ἴδιος, insólito, desconocido, y πάθος, enfermedad). Significa enfermedad que tiene una etiología desconocida.
  • Levodopa. Es el fármaco más eficaz contra la enfermedad de Parkinson especialmente durante los primeros años. Es una sustancia que se transforma en dopamina cuando llega al cerebro, por lo que facilita una mejora del movimiento y del equilibrio. Sin embargo, como con un tratamiento prolongado puede ir perdiendo efectividad, es necesario combinarla con otros fármacos agonistas dopaminérgicos, que potencian la efectividad de la dopamina.
  • Micrografía (del griego: μικρός, pequeño, y γραφή, escritura). Es el trastorno que se asocia con la enfermedad de Parkinson que consiste en la disminución progresiva del tamaño de la letra. La micrografía se correlaciona con la severidad de la enfermedad y el deterioro cognitivo; tiene una relación significativa con la bradicinesia y la hipofonía.
  • Marcha “à petit pas”. Se refiere a la forma de caminar con pasos cortos, propia de los enfermos de Parkinson, entre otras enfermedades. Con la lentitud en la marcha están relacionadas la bradicinesia y la festinación. Este tipo de marcha se asocia con otra característica de la enfermedad de Parkinson, la marcha cautelosa y precavida, que procede del miedo que los enfermos tienen a caerse.
  • Neurona. Las neuronas son las células funcionales del sistema nervioso. Tienen una forma alargada y están especializadas en la transmisión de los impulsos nerviosos. Se componen del soma o cuerpo celular, que contiene el núcleo; de dendritas, que son unas extensiones especializadas en la recepción de los impulsos nerviosos procedentes de otras neuronas, y del axón, que transmite el impulso nervioso a otras neuronas.
  • Neurotransmisor. Las neuronas se relacionan entre sí a través de la sinapsis. Así pues, el impulso nervioso se transmite mediante la sinapsis, que se inicia mediante una descarga química que produce una corriente eléctrica en la membrana de la célula emisora; cuando esta corriente llega al axón, la célula produce un tipo de sustancia (neurotransmisor) que se deposita en el espacio que hay entre la célula emisora y la receptora. Algunos ejemplos de neurotransmisores son la acetilcolina y la dopamina, neurotransmisores relacionados con la enfermedad de Parkinson.
  • Parkinson, James (Hoxton, Londres 11 de abril de 1755-Londres 21 de diciembre de 1824). Fue médico, botánico, sociólogo, paleontólogo y geólogo. Compatibilizó el ejercicio de la medicina con la política. Dedicó gran parte de su vida a la investigación de la gota, enfermedad sobre la que publicó un tratado. Fue el primero que describió la sintomatología de lo que él mismo denominó, en 1817, “parálisis agitante” y que Jean Martin Charcot, en 1884, denominó enfermedad de Parkinson, en honor a su descubridor.
  • Parkinson plus. Este término se aplica a un grupo de síndromes asociados con la enfermedad de Parkinson que evolucionan de manera diferente a dicha enfermedad, por degeneración de otros sistemas neuronales.
  • Parkinsonismos. Este término se aplica a un conjunto de patologías, que presentan síntomas semejantes a los de la enfermedad de Parkinson. Suelen ser enfermedades degenerativas que presentan más síntomas que la enfermedad de Parkinson y que no responden a la medicación de la misma forma que la enfermedad de Parkinson. El parkinsonismo secundario puede ser causado, por ejemplo, por el S.I.D.A., la encefalitis, un accidente cerebrovascular, por ciertos medicamentos o por otras causas, como, por ejemplo, por sobredosis de narcóticos, intoxicación con monóxido de carbono, mercurio o de otros productos químicos.
  • Patogenia. Es la rama de la patología que estudia las causas de las enfermedades.
  • Prevalencia. En epidemiología, se denomina prevalencia a la proporción de personas pertenecientes a un grupo concreto que, en un momento determinado, están afectadas por una enfermedad concreta.
  • Propulsión. Es la tendencia que tienen los enfermos a irse o caerse hacia adelante. Es causa de caídas frecuentes.
  • Prosopagnosia (del griego: πρώσοπον, rostro, y ἀγνωσία, desconocimiento). Se llama agnosia facial y consiste en la incapacidad para reconocer los rostros de los demás e incluso la propia cara.
  • Receptores dopaminérgicos. Son las proteínas de ciertas células que ayudan a fijar la dopamina.
  • Retropropulsión. Es la tendencia que tienen los enfermos a irse o caerse hacia atrás a causa de problemas de equilibrio. Se denomina también a la tendencia que tienen los enfermos de Parkinson a caminar hacia atrás si se les empuja desde delante o al comenzar a caminar.
  • Rigidez. Cada músculo corporal tiene su músculo contrario o antagonista. El movimiento es posible porque, a la vez que un músculo se vuelve activo, su antagonista se relaja. En los enfermos de Parkinson, se produce la rigidez o resistencia al movimiento como consecuencia de la ruptura de ese equilibrio necesario entre los músculos y sus antagonistas. Cuando los músculos permanecen contraídos, la persona siente dolor, a la vez que experimenta rigidez o debilidad. La rigidez se produce por el déficit de dopamina unido al exceso de acetilcolina.
  • Sistema nervioso central. Es una estructura biológica que poseen los individuos del reino animal. Está formado por millones de células especializadas, llamadas neuronas. El sistema nervioso central está compuesto por el encéfalo y la médula espinal. Recibe y procesa los estímulos que proceden de los diferentes sentidos y transmite las respuestas. Está protegido por cubiertas óseas y membranosas. Las estructuras óseas son el cráneo y la columna vertebral. La especialización de las células que lo componen hace que su regeneración sea prácticamente nula en el caso de sufrir un accidente.
  • Somniloquia. Es un trastorno del sueño que consiste en hablar en voz alta durante el sueño. Es habitual durante la niñez y suele desaparecer en la pubertad. Puede variar entre emitir simples sonidos hasta proferir largos discursos, que no siempre son inteligibles. La somniloquia es frecuente entre los enfermos de Parkinson.
  • Sustancia negra (Substantia nigra o Locus niger). Es un área pequeña y heterogénea localizada en el mesencéfalo, que se llama así porque tiene un color oscuro. Es un centro de control del movimiento que existe en el cerebro. La pérdida de células nerviosas de la sustancia negra productoras de dopamina desencadena los síntomas de la enfermedad de Parkinson.
  • Temblor. Se trata de la agitación, a menudo en una mano, que en la enfermedad de Parkinson es por lo general más perceptible cuando la parte afectada permanece en descanso. El temblor de reposo va acompañado normalmente de lentitud de movimientos (bradicinesia), rigidez muscular y marcha anormal (marcha “à petit pas” y festinación). En la enfermedad de Parkinson, el temblor suele ser rítmico, cesa con la actividad y con el sueño, aumenta con la tensión emocional, tiene una oscilación lenta, afecta inicialmente a una de las manos y no suele afectar a la región de la cabeza.